“LAS COSAS DE EL LUGAR”: De noviazgos y Mi mujer dos y…

De noviazgos

Los Oveas, na mas que no tardaban en casarse. Juan, anda que fue na má que tres días novio de su mujer: tó la vía... Le hablaba tendío, por las rajas que tenía la puerta por abao. Tendría ya 50 años. Se casaron tos cuando ya les faltó la madre.


Antonio, se lo dío a toas. Un día se pegó a Pepa, toa la callerral abao, hasta la casa de Almansa, mu pegaito, sin desir ni pío, con hipo, como bebío. Entonses Pepa:
-Mira, chiquillo, si me quieres desir algo, vete al casino y te tomas antes un café cargaito y lo que tengas que desir me lo dises

A uno que hablaba con su novia por la ventana alta, subío en unas escaleras, se la quitaban y se queaba colgao de la ventana.


Mi mujer dos y…

Años 50, todo tipo de estrecheses: “polvo sudor y lágrimas” pero sobre todo ¡Hambre!:
Manuel en la taberna, cabizbajo, pensativo, triste. Él siempre ocurrente a pesar de los tiempos que corrían…
¡Chiquillo!, Manuel, ¿qué te pasa hoy?
“Tate callao… soy el hombre más desgraiao del mundo.
Mi mujer ha tenío dos y… la guarra uno”

Transcripción: Luis Torremocha

“LAS COSAS DE EL LUGAR”: “La Palanca” y Los de las Parras, los “Anafes” y Juan Colores

“La Palanca”

Dos hermanos, Frasquito y Juan, estaban hasiendo un poso y prendieron a Juan, porque había cogío una noche a la “Palanca” y se la echó al cuadril… la Palanca era ía del Canito y estaba junta con Periqués.
Uno de los dos, Frasquito, se quedaba allí de noche, guardando las herramientas y eso.
Por la mañana que no venía…, que no llegaba… y ya le dío Juan Chicón:
-Tu Juan está preso
-¡Preso!, ¡preso!, ¿por qué?, ¿qu’ha hecho?
-Cogió a La Palanca, pero pataleando ella s’ habia escapaos y se fue al cuartel, a denunciarlo.
- Y La Palanca, ¡me cago en dios!, no s’ha casao en estos ríos hasta con los sapos.


Los de las Parras, los “Anafes” y Juan Colores


Estaba Miguelillo Mancebo y Frasco. Miguelillo lleva muchos años en el manicomio. Frasco era un granuilla, se reía uno con él. Se ponía en la puerta del casino, lloviera o no lloviera…frente al reloj y cuando daba la 1ª campaná de las 12, volando pá su casa.
Se lo llevaron al Servicio, a Melilla y desía que había ío en una tabla(en cubierta)
Anafes, una ve y otra ves… y otra ves…, los Anafes auténticos, el Antoñuelo, a Frasco:
-Fuiste en una tabla a Melilla, mira que…vaya viae que echastes.
Frasco un día s’hartó y le dío¡¡A-NA-FES!!y ya toa la familia fue A-na-fes.

Había tres o cuatro mueres con las mueres de los guardias, una de ellas la madre de los Anafes, Ägueda. Juan Colores vivía en frente del cuartel. Estaba un día en su puerta, con un sombrero palma del año antes…, estaba presioso!.., se lo había encontrao en La Huerta.
Pasaron las mueres que venían de lavar y lo miraron:
-¿Quién es el del sombrero?
-Agueda: no lo veis… el Feo Colores.
Juan la oyó y la que lió:
-Va a desir el Feo Colores, la mare que la parió, no s’ha fiao en esos íos que tiene con las narices que paresen carretes partíos… (Es que eran chatungos).


Transcripción: Luis Torremocha.

“LAS COSAS DE EL LUGAR”: Las “ensalaillas” y Los Chumbos

Las “ensalaillas”

Antonio y Juan Colores le gustaban la “ensalaillas” de forma totalmente contrapuesta.: mucha sal y mucho vinagre Antonio y Juan tó lo contrario y acababan peleándose, aunque al final la hacían como quería Antonio. Y otro de los presentes, que tenía los ojos muy coloraos, como ensangrentaos, los asusaba y entonses Juan, mirándolo atravesadamente, le espetaba:
- Míralo, con esos ojos que paresen dos higos de carne de toro.


Los Chumbos

Tenia Frasco unas chumberas en la huerta y un pariente, el padre del Nene, le dijo:
-Me hacia falta ir por unos chumbillos pa los muchachos, pariente.
-Ve por ellos, coge los que quieras.
Pero en la finca estaba el hermano del amo y no hacia ná má que protestar a su alrededor mientras que el pariente los recogía.
Venga a pelear, venga a pelear...
Entonses, el otro, los que llevaba recogíos, harto, enritao, los vasió disiéndole.
- ¡Ahí los tienes!.. ¡Y te los metes en los guevos!
Y es que ya los tenía vendios, a escondidas, a uno para la feria de El “Entreicho.”
Por cierto, que este cargó unos cuántos capachos y toavía no l’an dao una gorda.

Transcripción: Luis Torremocha

“LAS COSAS DE EL LUGAR”: La Pirinaica

Ponían La Pirináica en El Casino y ni Miguel ni María sabían ná, a la entrá de la escalera, la radio, y unos pocos, allí, escuchando, y estaba una noche hablando de Rusia… que habían hecho unos presupuestos para construir un pantano… o no sé qué cosa, por no sé cuantos millones de rublos y dice Miguel: “anda que trillan con tablas.” Había entendido rulos.
Otra vez desían en la Pirenaica que a Franco le esperaba la horca y la tumba y desía el Mellizo: “Eso de la horca es que va a ir a bacinar…eso no tiene que ver con ná…”
Otra noche estaba yo (Antonio), después de salir de la cárcel, buscando La Pirináica y era mu difícil. A mi papá le gustaba escucharla, pero después de yo estar preso le daba susto y va y me dise: “sí, sí, ponla que ahora con poco son se baila”.
A aquel Manuel, el capatás, estuvo preso por eso, lo pillaron con su hermano, que era rojo, escuchándola. Manuel era de derechas. De la Falange de las Arcas, de tu tía Juana (Juana Duran) y aquella ente… él había ío a ver a su hermano… y lo pillaron. En la cárcel lo iban matar. Él desía: “ cudiao con haberme traío a mí aquí , a mí me gusta el Caudillo…”. En el calabozo no se cabía y pá ir a orinar de noche, a conciencia, chiquillo, los presos, unos pisotasos le daban…” este carretero mierda, a qué habrá venío aquí…” y ya Ramón el del Puerto La Horca, que eran vecinos, le dío: “mira, tu seas lo que seas, te estás callaito, te hases el rojo, si no te matan…”, y ya cambió y lo dearon.
Con la pirenaica… hasta que el guardia Casanova lo prohibió.

Transcripción: Luis Torremocha

“LAS COSAS DE EL LUGAR”: La muerte de Franco… y otras precauciones

Cuando yo (Miguel) trabajaba en el campogol, en el año 75,-¿no fue el 75 cuando murió Franco?- había uno de ahí, del Puertolatorre, ¡un tonto!, allí le desían “El Gorrilla.” Tenía una gorrilla de hule y jugaba al dinero, al dómino, y tos los lunes me daba un puro. “Cuando vea que le doy un puro es porque he ganao en el fin de semana”
De manera que un lunes me dio un puro. Se había muerto Franco hasía…el día antes. Llegamos a la oficina, en el campogol, yo encendí el puro, llega el administrativo y va y dise:
-No ves ese, fumándose un puro, ¡Franco de cuerpo presente! y ¡¡él fumándose un puro!! Y… ¡¡¡ encima de Casabermeja, también!!!

Una de las veces que vino Franco a Málaga, Frasquito Navarro me dijo (Antonio el del Estanco) vamos a ir a ver…Franco iba pá las Cuevas de Nerja…Fuimos en moto y en el Cantal, en el Rincón, paramos. Yo tuve ganas de mear y me dirigí a una alcantarilla. Enseguía un guardia que se me echa encima… ¡Qué creía que yo iba a poner una bomba!
Resultó ser del cuartel de la Barranca y Frasquito lo conocía. Era un Alcántara… ¡menos má!
“Meterse, hombre, ahí en estos momentos,”me dijo.

Transcripción: Luis Torremocha

“LAS COSAS DE EL LUGAR”: Hablando Fino

Algunos iban al ejército, o, qué te voy a decir, a Málaga mismo, y volvían hablando fino, venían diciendo pamplinas.
-¡Oh!, ¿qué s’arbol eseste, papá?
- Vas a decirme qué árbol es, con las veses que t’as sollao el culo subiéndote en la higuera.
Bueno, eso se lo achacaban a Salvado el de Las Parras y a muchos, pero no es verdad. Eran chalauras que se desían.
Sí es verdad, tú ves, como era mu redicho Salvador, un día que Bastián Gallito estaba apuntándole a lo que a él le paresían unos pájaros raros, que volaban hacia Frentelasparras, y eran unas gallinas guineas. Entonses Salvador lo vió y le pegaba voses:
“¡¡Gallito, Gallito, no dispares,… que son aves de corral!!”

Un día en el Casino un cachondo que tenía un reloj con números romanos se lo enseñó al “padre Antonio.” y dío la hora: los números romanos, bien daos. Entonses, Alfonso Barseló que andaba por allí, le pregunta:
-Bueno, Bastian, y ¿tu sabes leerlos?
- Claro, si se lo hubiera enseñado el reloj a un chavea de estos, seguro que no lo sabían
Uno de los que estaban en el grupo, que tenía mal genio, especialmente con un vaso de vino ensima, se enfadó y dijo:
“Oyes, que me ha puesto de tonto perdío”.

El “padre Antonio” en la Boeguilla pedía:
“Pepe, echa pacá un cristalito.”
Era mu malagueño… se hizo mu malagueño.

Transcripción: Luis Torremocha

“LAS COSAS DE EL LUGAR”: Casarse por poderes y El entierro de Hazaña

Casarse por poderes

Pepe Granaos que vivió en la parte de arriba de la taberna de Juanito Ramos, se había casao con la Characa, antes se habían juntao pá librar a Pedro.

Mi hermano Frasquito (Miguel) se casó por poderes y al año o dos años se juntaron.

Casarse por poderes es casarse con una novia postisa. Por ejemplo, la tita Bastianica: el novio estaba en América y uno hiso de novio aquí y ella de novia y se casaron así, pá poderse ir pá América, llamá por su marío.

Bolaños casó a Antonio (el del Estanco) por poderes. El padrino era Juan el Ingeniero, con un poder otorgao por Antonio… era el año 70, cuando la caía, porque él estaba mu implicao...estaba mu metío a través de Javi. Incluso había sido interrogado por un polisía, muy amable. Yo (Antonio) creo que lo mandó mi familia para asustarme…


El entierro de Hazaña

D. Francisco Hidalgo… era chicuelillo, - ah, yo no lo encontraba así-…fue cura en la República y en la guerra Cómitre, que fue vicario. Estuvo escondío en la calle Jinete, vendió verduras…y volvió aquí y era el que, cuando tomaban algún sitio, se hasía una manifestasión y él daba el mitin en el balcón del ayuntamiento.
Por aquel día se hiso un entierro de Hazaña de burlesco: Juan Gallito de cura, Luis el carpintero con gabardina negra…, con sus Gori-goris…, hisopos… El cura Cómitre: “ esto no puede ser, es una mofa de la religión. "
El cabo Hernández salió a prohibirlo pero M. Perche dío que pa lante`
. Farriñas, que iba de sacristán, al ver aquello, se volvió en las 4 esquinas .Después explicó que es que querían que fuera su papá y no estaba en condiciones y por eso había ío él.


Transcripción: Luis Torremocha

“LAS COSAS DE EL LUGAR”: Fiambrera, otro Fiambrera y de vendeores y feriantes

“Fiambrera”: aquel sargento…” que to era meor en su pueblo que lo que había aquí….que no sabíamos trabaar en el campo, que lo que se sembraba de trigo aquí tenía que ser otra cosa…que no sabíamos ugá a las cartas…que no se hasían posos, que en su pueblo se hasían posos”..: ¡¡ En su pueblo, tó era meor!!
Cuando la caía aquella, la del 70, el veterinario, D. Emilio: “Anda que diga ahora que en su pueblo hay más comunista qu’ aquí.”

También estaba Fiambrera, que era pelirrojo, con los pelos revueltos, que era de Cútar, tenía un quiosquillo y lo mareaban muchísimo, hasta lo hasian llorar. Unos caramelillos maluchos, endebles, se le derretían al sol.
Venía también aquella rubia, que vendía arvellanas y le hasian trastás: una trupe de rapagones le tiraron las arvellanas y se mató llorando, la pobre.

El guardia civil aquel que le pegó el tiro a El Espartero, que lo deó coo, le pusieron también Fiambrera.

Los feriantes, que eran siempre los mismos. Vino uno, el de los cuadros, con una guapetona y se la llevaron unos cuantos al arroyo Aranda. Pasó lo que fuera. Pedro Rios vió la cosa desde su corral y después lo selebraba mucho. Bueno, los metieron presos y, a Pedro también, y el padre luego le desía: “Periquillo, otra vez que te metan preso que no sea por ver los toros de la barrera.”
Era Encarnita o…Elisa. Fueron a buscarla, la llamaron y ella contestaba: Aquí estoy en estas ¡profun-Di-Da-deees!
Es que en aquellos tiempos el aburrimiento en El Lugar era tremendo. Mucho trabao, de sol a sol, en los cortíos y no había ná que ver, ná… ¡Hay que ver!: Chiquillo, unas borracheras, quimeras, quimerasos…surgían matones…

Transcripción: Luis Torremocha

“LAS COSAS DE EL LUGAR”: Clases particulares 2 y Despistes o la fuerza de los apodos ·

Clases particulares 2


Pepe El Carpintero estaba enseñándole –había estao en la escuela una temporailla- a su Frasquito los días de la semana, los meses del año y… Frasquito se iba de los meses a los días de la semana… y los liaba:
Enero, febrero, lunes… martes… mayo… abril
Y entones Pepe, mirándolo con guasa, le desía:
“Y la feria del Trabuco te la deas atrás.”


Despistes o la fuerza de los apodos 

Llega un forastero al Lugar y se encuentra a Pedro El Mono y le pregunta:
-Buen hombre, vengo pá hablar con D. Pedro Sánchez Mendes. ¿Lo conoce?
-No, no…no sé… ¿y el apodo?
Le disen “El Mono”
-Servidor de Vd.

Antonio El Lagarto trabajaba en Málaga y se vino con un camionero.
-Yo estao en la mili con uno de Casabermeja, se llamaba José Amores Muñoz. Vd. ¿lo conoce?
-No…no…yo…me suena, pero como no sea por los apodos
-Pues también tenía apodo. Lo llamaban El Lagarto
-Cucha, ¡¡ ese es mi Pepe!!

Juan El Lagarto ugaba al dómino con Alfonso y lo mareaba mucho: “yo estoy ugando solo”…le gastaba muchas bromas… se tenían mucho aprecio.
Se murió Alfonso y le desían:
-Me cago en la mar, Juan, cómo se murió Alfonsillo
-¡¡Me cago en la mar joía!!No mentármelo siquiera!

Transcripción: Luis Torremocha

“LAS COSAS DE EL LUGAR”: Cristóbal el de La Morena y Pepe Plaza

Cristóbal el de La Morena


Vendió Cristóbal ½ fanega de tierra que tenía, cuando el estraperlo, pá echarse a estraperlista con el mulo y… cá ves que salía, lo pillaban…, y estaban cá ves má mal, má mal en la casa. La madre que no estaba mu al tanto de la cosa, desía:
“Oyes, disen las entes que con el chancleteo, -que era el estraperlo-, s´estan poniendo munchos ricos. En mi casa desde que mi Critobitas dispuso de echarse al chancleteo, mi casa patrlás, patrlás, patrlás…




Pepe Plaza


Pepe Plasa, con los años, le dio por la beatería.
Me acuerdo (Antonio) una noche en la Sinquina,- a lo meor Fernando el de la Cuchilla. Sí, Fernando. Iba toas las noches del Molino del Chileno a la Sinquina, a la de Antonio Cañá… ¡y lo que llevaba… perdía!... Nunca dijo “alto”…, pero una noche le tocó una sinquina:
“¡¡Alto!!. Me cago en dios y en la virgen puta,”
Y le desía Pepe Plasa:
“Oyes, no tienes bastante con cagarte en la Virgen; oyes, tiene que ser puta, ¡también!”

Crió unos guarrillos Pepe y fue a matárselos Clemente Villarrás. Tenía mosto Pepe Plasa y Clemente le tiró bien...Pelando un guarro se cortó una miilla:
-¿Cómo me las he arreglao yo pá cortarme? ¡Me cago en dios!
Y Pepe Plasa:
¡“No ves qué gracioso!; míralo,” ¡qué primor!
Pepe desía que había visto a Dios.

Transcripción: Luis Torremocha